Lácteos

El consumo de lácteos está directamente relacionado con una buena salud ósea y su consumo se recomienda especialmente en la infancia y la adolescencia, cuando la masa ósea se está formando.

Consumir productos lácteos ayuda también a reducir el riesgo de osteoporosis y en los adultos influye en la disminución del riesgo de enfermedades cardiovasculares y de la diabetes tipo 2, además que mejora los niveles de la presión arterial.